8 de abril de 2011

Compositores de marchas procesionales (III)

En esta entrada vamos a hablar de los compositores más importantes en el panorama de la música cofrade, los artífices de esas marchas que a todos nos despiertan sentimientos y son un referente en nuestra Semana Santa. Marchas clásicas y actuales, que a todos nos suenan cuando las escuchamos detrás de nuestros titulares.


Para ello vamos a basarnos en un escrito que nos ha dirigido D. Manuel Madrid Caba, cofrade manzanareño, que nos hace un repaso sobre las más importantes marchas de palio. Desde aquí agradecer a él y a su hija Miriam hacernos llegar sus reflexiones.

"Aunque existe algún precedente en este tipo de composiciones, como Rocío (Manuel R. Vidriet), será el genial maestro Manuel López Farfán (1872-1944), quién a mi juicio marcará un antes y un después en este estilo definitivamente, consiguiendo algo tan difícil como es popularizar el género, sin restarle un ápice de calidad y categoría. Pasan los Campanilleros (1924) se convertirá en referencia emblemática, que incluso muchos años después la cantaría el recordado Carlos Cano (letra de Antonio Burgos). No escucharla una Semana Santa es como no haber probado la rosca ni las torrijas. Estrella Sublime (1925), paradigma de la marcha procesional, dedicada a la sevillana Virgen de la Hiniesta creará escuela .

A partir de aquí serán muchos los compositores que seguirán esta tendencia: Macarena (1943, Emilio Cebrián Ruíz), Virgen de las Aguas (1953, Santiago Ramos), única marcha de este autor cacereño prematuramente desaparecido y una de las más interpretadas en la actualidad con acompañamiento de cornetas, Coronación de la Macarena (1964, Pedro Braña), Esperanza Macarena (1968) de Pedro Morales, este excelso compositor de Lopera (Jaén) merece una antología aparte, sobrecogedora la marcha dedicada a Juan Jesús, su hijo fallecido.
Virgen de la Estrella (1970, Pedro Gámez Laserna), un regalo para esta Dolorosa trianera cuando cruza el puente al atardecer, Encarnación de la Calzada (1983, J. Santos), Rosario de Montesión (1986, Juan Velázquez) para una Reina Sevillana de la calle Feria, Triana tu Esperanza (1990 José de la Vega Sánchez) autor cordobés fallecido en Abril de 2010.
Madre Hiniesta (1997), poesía hecha música y Candelaria (2001) ambas de Manuel Marvizón, (del que ya hablamos en la primera entrada de estra sección).
Nazareno y Gitano (1999, P. González y Martín Salas) o Costalero (Sánchez Berenguer).

Un apartado especial merece D. Abel Moreno Gómez, quién a partir del último tercio del pasado siglo tiene un repertorio amplísimo.

En la actualidad, el sevillano “Paco Lola” ha compuesto varias marchas, que a pesar de alguna objeción por parte de puristas intransigentes, en mi modesta opinión son dignísimas, y han arraigado en el sentir popular. Caridad del Guadalquivir (2000), Salve Baratillera (2001), Callejuela de la O (2003) o La Macarena (2004) son ejemplo de ello.

El malagueño Rafael Hernández se prodigó en este género, dejando una joya para su ciudad, Malagueña Virgen de la Paloma (1982), que es un símbolo para los cofrades. También para Málaga y dedicada a la titular de la Hermandad del Cautivo, Eloy García compuso Alma de la Trinidad (2000), que con un aire algo distinto, podemos incluirla.

Capítulo aparte dedicamos a un insigne compositor que podemos considerar malagueño, (Perfecto Artola Prats (1904-1992). Nacido en Benasal (Castellón), fue director de la Banda Municipal de Málaga durante dos etapas y fundador de la banda Miraflores Gibrajaire. Sus obras son un prodigio de elegancia y solemnidad, de las 38 marchas compuestas, todas están dedicadas a Hermandades malagueñas excepto dos. Destacamos Virgen de Gracia (1984), Coronación Virgen de los Dolores (1987), y el Himno Coronación de la Esperanza (1988). Su legado musical ha enriquecido los de por sí majestuosos desfiles procesionales de esta luminosa capital.

En Manzanares el Jueves Santo de 2009, la banda Julián Sánchez Maroto, en la calle Monjas y coincidiendo con el estreno del palio de María Consoladora de Afligidos, interpretó Victoria del Polvorín (creo que de Francisco Cano Ruíz), aquí la recogemos.
Debo destacar que esta Virgen Consoladora de mi Hermandad del Cristo en la Columna, posee una excelente marcha de José A. Sánchez- Ballesteros, si bien de corte bastante más severo.

Sirva esta semblanza también de merecido reconocimiento a tantas bandas del sur, capaces todos los años de acompañar con su música una Estación de Penitencia en la calle (algunas de más de doce horas), tocando de forma casi ininterrumpida, tras cada “chicotá”, durante toda la Semana. Así también se gana el Reino de los Cielos."

Muchas gracias de nuevo a D. Manuel Madrid por su escrito y su exquisito gusto a la hora de la elección de las marchas.

1 comentario:

exaltadora 2008 dijo...

Vaya recopilaciónnnnnnnnn. Me encanta. Muchísimas gracias por hacernoslo tan fácil, escuchar música cofrade ahora es más cómodo, basta con visitar esta página. Un abrazo cofrade.